La decisión se tomó tras una catarata de denuncias. El Ministerio también quiere grabar las llamadas telefónicas. Casí el 90% de los comisarios están bajo investigación.

La decisión de instalar cámaras de seguridad en las comisarías fue tomada por el Jefe de Policía de Montevideo a raíz de la cantidad de denuncias presentadas en los últimos meses contra la policía por presuntos abusos, maltratos y acusaciones de omisión de asistencia.  

Como forma de controlar el funcionamiento de las 25 seccionales de Montevideo, Jefatura pretende además de instalar cámaras, monitorear y grabar todas las llamadas telefónicas que ingresen a las comisarías.

Según datos oficiales, 300 policías son cesados por año debido a irregularidades investigadas por Asuntos Internos y el objetivo de las autoridades es mejorarla imagen de la policía y bajar a cero las denuncias.

Actualmente rige una norma por la cual los comisarios reciben una compensación que alcanza a la mitad de su salario por cumplir ciertas metas de cambio cultural. 

Según información a la cual accedió el semanario Búsqueda, 22 de los 25 comisarios de Montevideo están bajo investigación administrativa por presentar información falsa para cobrar el dinero extra. 

El Jefe de Policía de Montevideo maneja el tema de las cámaras con total hermetismo.